Corderos armados se amotinan en una carpa y se resisten al sacrificio

Un grupo de peligrosos corderos armados y bien organizados han tomado una de las carpas habilitadas por el gobierno de Ceuta para la celebración de la Pascua musulmana del Sacrificio, cogiendo como rehenes a varios matarifes.

Fuertemente armados con rifles semiautomáticos, pistolas de agua y muchas piedras, un grupo indeterminado de corderos, aunque testigos presenciales hablan de una veintena, se han amotinado a primera hora de la mañana en la carpa situada en Miramar Bajo. Varias unidades de la UIP (Unidad de Intervención Policial) con experiencia en tomas de congresos y asaltos a Atocha, han rodeado el lugar con el objetivo de que los corderos, «bien instruidos en artes militares y muy organizados», según fuentes policiales, depongan las armas.

Algunos corderos tienen pasado militar

Las mismas fuentes han informado a este medio que para conseguir su objetivo, los corderos han tomado como rehenes a varios matarifes y un hombre pequeño con bigote (se desconoce su identidad), no sabiéndose por el momento quién ha sacrificado a quién. Igualmente, los corderos se han hecho fuertes en un edificio de la zona con francotiradores en la azotea (foto de la noticia). Lo que hace la labor policial aún más complicada. Antes de que corra la sangre en la dirección contraria a la esperada, la Policía Nacional ha enviado hasta el lugar del suceso a expertos negociadores. Como Beatriz Palomo, «que sabe de todo y como aburre seguro que al final deponen las armas», y a Juan Luis Aróstegui, según el gobierno de la ciudad «una baja colateral siempre asumible».

Por su parte, los corderos han hecho público un comunicado usando voces distorsionadas con globos de helio para no ser reconocidos. En el mismo aseguran que «nos han engañado, vinimos supuestamente a una excursión cultural a Ceuta para ver la escultura en homenaje a la cabra legionaria». Según su relato el engaño fue a más porque «empezaron a bromear con que a la brasa y en pinchitos estamos de muerte, pero nunca creímos que estuvieran hablando en serio». En dicho comunicado los corderos exigen al Delegado del Gobierno una amnistía firmada por el Rey y un barco listo para huir porque de lo contrario han amenazado «esto puede convertirse en una orgia de sangre».