Niños de todo el mundo se han quedado sin regalo esta Navidad por culpa del temporal de levante que ha dejado incomunicado a Papá Noel en Ceuta. Fatídico inconveniente al que se le unió la quema de su trineo mientras repartía regalos.
Lo que parecía ser una noche rutinaria en la actividad laboral de Papá Noel se ha convertido en todo un drama para millones de niños de todo el mundo, que no pudieron disfrutar de sus regalos tras todo un año de buen comportamiento para nada. La culpa la ha tenido un fuerte temporal de levante, causante de que no pudiera abandonar la ciudad en el primer barco de la mañana, quedando incomunicado. «Los muertos del levante», manifestaba Papá Noel ya como un caballa más.
Sin embargo, ésta no ha sido la única mala noticia para este conocido personaje en su paso por la ciudad autónoma. Mientras realizaba su reparto rutinario de regalos a los niños caballas, unos desconocidos prendieron fuego a su trineo, continuando así la quema de vehículos ya tradicional en Ceuta. Este percance retrasó a Papá Noel que tras no conseguir un trineo de sustitución tuvo que recurrir a una Vespa para terminar el reparto. Tras ello, se dirigió a comprar su billete de 5.400 euros (una persona, trineo y ocho renos no residentes) con la certeza de las navieras de que el tráfico marítimo era normal y fluido, aunque ya no salió ningún buque con destino a Algeciras.
Estos inconvenientes no le impidieron cumplir con su tradicional cita con Ceuta de cada 24 de diciembre. De esta forma conocidos niños de la sociedad caballa recibieron sus encargos a Papá Noel. Es el caso de Juan Luis Aróstegui, joven centenario, que ilusionado disfrutaba la mañana del 25 con su equipación completa de la A.D. Ceuta, o José Antonio Carracao, que enseñaba al equipo de WikiCeuta con orgullo su nuevo gato eunuco, de nombre José Luis, o Francisco Márquez, rebosante de alegría con su juego de peines, gomina y hasta un espejo portátil.
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