El Teniente Ruiz amenaza: «Me ponéis brazos y piernas o no respiro»

El Teniente Ruiz ha dado un ultimátum a la Comandancia, «quiero un cuerpo como el Hércules. Con sus brazos y sus piernas o me paso a los ‘franchutes’ y no respiro». Un parado de la zona avisa: «Está azul de aguantar tanto la respiración».

El acto de homenaje a Jacinto Ruiz y Mendoza, más conocido como el Teniente Ruiz, el próximo 2 de mayo de 2013 tiene muchos visos de no poderse celebrar. El motivo, para muchos imprevisto, ha sido la negativa del propio Jacinto a protagonizar dicho acto porque «no puego aguantar más la respiración», palabras textuales según fuentes de la Comandancia General de Ceuta consultadas por WikiCeuta. Y es que según declaraciones del héroe de guerra, que se ha declarado partidario del movimiento 15M ceutí, «los políticos siempre igual, te prometo esto, te prometo lo otro, me dijeron que me pondrían brazos y piernas ¿tú los ves?», se preguntaba.

Según fuentes de Comandancia, el Teniente Ruiz lleva «desde tiempos inmemoriales» aguantándose la respiración a modo de protesta, aunque según afirman «también porque es un poco chulo y ya no tiene edad para tonterías, además, aunque no se le vea, se le nota la barriguita». Estas mismas fuentes reconocen que «cuando se le colocó en su plaza le prometimos un cuerpo pero se nos ha pasado y desde que llegó el Hércules no hay quien lo aguante. Y ahora no hay presupuesto». La situación parece insostenible porque Jacinto ha amenazado incluso al comandante general: «Tú eres calvo porque quieres, pero lo mío es peor. O me ponéis un busto, o me paso a los ‘franchutes'».

Además, todo apunta a que Jacinto no exagera un ápice, según un ceutí desempleado, y asiduo de la Tertulia Flamenca, «se le ve en la carita que está asfixiado ¿Lo han echado también de su trabajo, o qué?». Sin embargo, la solución no parece cercana. Defensa asegura tener «solo para tirachinas, un paquete de tabaco y los tres neumáticos de segunda mano que hemos usado para el homenaje». Por su parte, Don Paco Antonio ha afirmado que lleva «toda la vida sin vacaciones y no me quejo». Y Juan Vivas, entre lágrimas, comentaba que «no sé ni cuantos altos cargos tengo, como para saber si al Jacinto le he prometido un trabajo, una casa o un par de piernas».