Tras pagar la cláusula de rescisión a tocateja, Corea del Norte se ha hecho con los servicios del censor de Ceuta TV, que se incorpora al aparato de comunicación de Kim Jong Un, junto con La Verdad de Pyonyang, la ya extinta La Verdad de Ceuta.
El buen hacer de algunos profesionales de la comunicación en Ceuta no ha pasado desapercibido lejos de España y es que la fuga de cerebros no cesa. Todo un clásico del mundo de la comunicación abandonará pronto la ciudad rumbo a Corea del Norte. Capítulos de gestión brillantes, ya para el recuerdo, como la no emisión de una noticia mencionando a WikiCeuta en un informativo de Ceuta TV, versión local de la desaparecida CNN+, y eliminación de la misma en YouTube cinco minutos después de su publicación ha sido el espaldarazo definitivo para que el censor de el salto a la conocida por muchos como la ‘champions’ de la censura.
Tras la muerte de Kim Jong Il, el máximo mandatario de Corea del Norte, Kim Jong Un, necesita «sangre nueva» para su gabinete de comunicación. Según fuentes consultadas por este medio, la mala gestión ante la prensa del lanzamiento del misil de largo alcance ha sido definitivo para que el joven dictador ansiara de nuevas estrellas del vituperio hasta poner sus ojos en tierras caballas. «Miral intelné, el tuitel y pichín pichán descubril mucha calidal en Ceutal», apuntaban desde el gobierno norcoreano al poco de anunciar el fichaje en una multitudinaria rueda de prensa como si de una estrella del fútbol se tratara. En ésta manifestaron su gran sorpresa con «Ceutal pensal occidental pero es como Corea, poder mandal y demás callal».
Por su parte, en la televisión local han rehusado a hacer cualquier tipo de declaración, lo cual evidencia la buena labor del censor hasta el momento de su marcha. Sin embargo, fuentes cercanas han asegurado que el censor «no dudó en ningún momento la oferta» porque «Corea se parece mucho a Ceuta. Allí nada más que hacen carrera los amigos del régimen y que saben de dónde hay que agarrar». Además de que «Juan se me ha quedado pequeño. Yo siempre he sido de Gordillo». Dato nada anecdótico y es que los norcoreanos han quedado fascinados con la web La Verdad de Ceuta, que también han comprado y próximamente pasará a denominarse La Verdad de Pyonyang.
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