Sanidad confirma que la campaña antirrábica será gratuita para la raza política

«No es año electoral pero la raza política está sacando los dientes con mucha facilidad», explican desde el Colegio de Veterinarios de Ceuta. La campaña también se aplicará a otros sospechosos de infección como Manolo de la Torre.                   

Los privilegios de la clase política no paran. La campaña antirrábica (que comienza el próximo lunes) también será gratuita para la especie política. La medida ha surgido después de que los expertos hayan percibido cierta crispación en el gremio, «hemos hecho un estudio exhaustivo de actitudes, gestos, descargas de ira en diferentes Plenos y no nos cabe duda de que se trata de un claro brote de rabia», ha afirmado el jefe del servicio veterinario de Ceuta, Antonio Terrier, quien alerta a la población de que si se cruzan con un espécimen rabioso, «tengan mucho cuidado, que muerde». Un aviso que se extiende a personajes como Manolo de la Torre, «que en la barra del bar parece muy dócil pero después se transforma cual hombre lobo».

La medida ha causado indignación entre la población. «Ya sabíamos que tenían la rabia, sólo hay que ver al Aróstegui como le sale espuma por la boca cuando habla», contaba José mientras paseaba su pastor alemán, que según contaba «tiene más estudios que cualquiera en el Pleno». «¿Y ahora tener que pagar nosotros más vicios?. Indignante», relata África, dueña de un hurón de nombre Carracao, «porque cuando tiene hambre pone la misma cara que el socialista en las ruedas de prensa». Los expertos consultados han asegurado que es importante «pincharlos ya, antes de que trasladen el mal rollo al resto de las sociedad», ya que existen varios casos de contagio, la mayoría «entre asesores que ya no distinguen y muerden sin piedad alguna».

Por último, desde Sanidad se pide a aquel sector de la población que tenga un familiar político que no lo esconda en casa, que le ponga valor y acuda con él acompañado de su documentación a cualquier punto de vacunación evitando cualquier contacto directo con los medios de comunicación, ya que, según los expertos consultados por este medio, los micrófonos aceleran el desarrollo de la enfermedad, «de ahí que no junten dos palabras seguidas con sentido, lo que es un claro síntoma del contagio junto con los dientes tipo sable», matizan.