Una señora riega sus plantas y hace saltar la alerta roja por fuertes lluvias

Todas las alarmas saltaron entorno a las siete de la tarde del jueves cuando el 112 de Ceuta recibía una llamada alertando de fuertes lluvias torrenciales en las cercanías de la calle Jaudenes, donde se desplegó el dispositivo de emergencia.

Según el servicio de emergencias, «una vez activada la ansiada alerta roja hasta la zona se desplazaron varias dotaciones de bomberos, Policía Local y una ambulancia medicalizada» como parte del servicio preparado por la llegada del huracán Nadine. Una vez allí «los efectivos de emergencias pudieron comprobar la intensidad de la lluvia en el número 20 de la mencionada calle en confluencia con Queipo de Llano, llegándose a registrar 30 litros por metro cuadrado«. Al lugar del suceso también acudió una lancha de Cruz Roja y es que según informan los testigos «hubo momentos en los que Jaudenes parecía Venecia, ¿qué capacidad tendrá la regadera de esa señora?», se preguntaban atónitos algunos testigos.

Tal y como ha dado a conocer el 112 de Ceuta en un principio «pensábamos que los efectos de Nadine serían además de en nuestras propias dependencias, inundadas aunque en este caso Pepe y Mohamed fueron los responsables al picar una tubería, más a nivel general en toda la ciudad pero se han localizado en esta zona en concreto» donde además del «chorro torrencial de agua también nos caía algo de arena oscura y alguna que otra hoja muerta aunque sin provocar daños personales». Eso sí, el 112 se felicita del éxito de la coordinación de la operación y ha dado la enhorabuena al bombero que cerró el grifo a la señora responsable de la alerta roja por lluvias.

Este medio ha conseguido ponerse en contacto en exclusiva con Adela, la causante de las lluvias torrenciales que han dejado al huracán Nadine en una anécdota. Desde su terraza de un cuarto piso la anciana confesaba que «yo sólo salí a regar mis plantas como todos los días aunque ayer vi a los geranios un poco tristes y como no llovía tanto como decían pues les eche un ‘poquito’ más de agua». Adela asegura que «sus plantas le hacen mucha compañía y las cuido como a un hijo aunque nunca pensé que se fuera a montar tal revuelo». En este sentido la responsable del suceso es crítica y afirma que «han exagerado un poco con tanto huracán y tanta lluvia tropical, si hubiera sido verdad no hubiera tenido que sacar la manguera a la terraza. Aunque la culpa es de los políticos», matiza.