Vivas se niega a participar en la cadena del cubo de agua helada por miedo a menguar

«Por eso nunca me baño en el Parque y sí en la orillita de la Ribera, que está más calentita», explica el presidente.

La cadena solidaria del ‘cubo helado’ ya ha cruzado el Estrecho y muchos son los personajes de Ceuta que ya se han mojado en apoyo a los enfermos de ELA. El único que ha mostrado públicamente su negativa ha sido el presidente Vivas quien ha asegurado que «si hay que donar unos euritos, llamo a Yolanda y que pida factura pero ¿mojarme con agua fría? Prefiero cortarme el bigote«. Una negativa que fuentes cercanas al presidente han explicado por su miedo a menguar, «por eso nunca se baña en el Parque Marítimo y sí en la orillita de la Ribera, que está más calentita», explican estas mismas fuentes mencionando al propio Vivas.

Quienes sí se han enfrentado ya al cubo de agua helada han sido el portavoz y perro de presa del gobierno de la Ciudad, Emilio Carreira, quien según fuentes presenciales en el momento del cubazo «no gruñó mucho más que cuando oye a Carracao«. Por su parte, el líder socialista ceutí también se ha mojado y sus compañeros aseguran que «se le quedó la misma cara de imagen congelada que tiene siempre». Y Aróstegui, cuando el agua helada empezó a caerle por la espalda «empezó a hablar entrecortado, como en árabe ceutí«, reconocen orgullosos sus socios de partido.

Sin embargo, quienes no han llegado a mojarse son el Hércules de la plaza de Constitución tras presentar una baja por tendinitis en ambos codos; Pepe Torrado, porque «le ha comprado unos cacahuetes al ‘Vitaminas’ y se está bebiendo el cubo»; García Castañeda, porque se ha comido el cubo; y  Sanín, a quien el PP le ha prohibido mojarse porque «presenta indicios fiables de brotes grémlicos«, explican desde el partido.